Nos agarramos fuertemente, no mucho, pero lo suficiente como para preguntarme que es lo que nos espera. Es deseo, es tortura. Debes ser una hechicera porque has hecho lo imposible, ganaste mi confianza. No juegues juegos será peligroso porque si me jodes, si me quemo te enseñare lo que es el dolor porque me han tratado como basura antes. Y el amor es maldito, deletréalo al revés te enseñare. Nadie me conoce, estoy frío y camino esta carretera, todo está solo. De nadie es la culpa solo mía, es el camino que elegí seguir. Helado como la nieve, no muestro cualquier emoción por eso. Por qué me pasa esto? Es como justamente yo pensaba que esto sería, como si estuviera intentando volver a empezar continuamente. Tengo un hoyo en mi corazón, soy como una montaña rusa de emociones. Algo me dice que no seguiré hasta que tu juguetees con mis emociones y las hagas subir. Es como una explosión cada vez que te tengo, no estaba jugando cuando te lo dije. Te robas mi respiración.
Hago lo que sea necesario porque cuando estoy contigo siento fuertes emociones, mi cuerpo duele cuando no te tengo y cuando estoy contigo se me van las fuerzas, no hay límites para llegar a donde haga falta, no hay barreras ni longitudes. Porque decimos eso hasta que encontramos a la persona que creemos que sera la definitiva, y una vez que la tenemos todo es diferente. Las quieres cuando ellas no te quieren a ti, cambian de sentimientos de un día para el otro. Esto no es ningún concurso y yo no soy la conquista de nadie. No estaba buscándote pero me tope contigo, debe de haber sido el destino. Pero hay mucho en juego, que mas hace falta para decidirte? Vamos a ir al grano. Pero una puerta se me cierra en la cara así que prométeme que si me hundo, me rompo y dejo mis sentimientos al descubierto, no estaré cometiendo un error. Porque yo soy un cohete en el espacio y tu corazón es la luna, y lo apunto directamente a ti. Directo a ti, 250 mil millas en una noche clara de junio. Y lo apunto directamente a ti
